Amenaza gravísima para los pinos

Durante el paseo del pasado domingo con los amigos de Plaza Vieja advertimos que los pinos del valle amarilleaban, o más bien, lucían las hojas de las partes inferiores con color pardo, vamos, secas. Era de tal magnitud la afección generalizada a los pinos que todo el valle había cambiado de color. En estas fechas es para que luzcan un verde intenso tras un invierno y primavera muy lluviosas.
Recordé una vieja noticia de hace tiempo que hablaba de una enfermedad que había entrado por Portugal y que mataba los pinos de ese pais.
Hoy estuve solo en la huerta y he podido apreciar que hasta el pino grande más simbólico del Cerrillo de San Marcos tiene de color pardo la mitad inferior. Incluso pinos jóvenes muy pequeños tienen partes secas. Es como si se extendiese con una rapidez vertiginosa.
A la vuelta he entrado en internet. Efectivamente, es la vieja noticia de Portugal. Pero ya está aquí. Y es muy grave. Tanto que puede acabar con la vida de todos los pinos del valle.
Viene de Japón, Corea y Taiwán donde ya mató millones de árboles. En 1998 entró en Portugal a través de las maderas de importación de esos paises.
El culpable es un nematodo de la madera del pino (Bursaphelenchus xylophilus) que lo asfixia. Lo transporta un coleóptero de pino en pino. La madre que los parió. Va a ser como la grafiosis de los olmos.
A estas alturas la Junta de Andalucía tenía que haber tratado los bosques para evitar el contagio. Menudo momento, sin un euro en las administraciones. Los pinos van a ser cadáveres de la crisis y de la globalización.